por Franco Masi
Miembro EOL Política Juventud 2023
Responsable NUBIOM
Docente local IOM2 – CID San Juan

El deseo, siempre joven.

Años movidos si los hay, este 2023, para mí ha sido una montaña rusa de emociones, actividades y trabajo.

¿Dónde estuve? En el ENAPOL, quizás uno de los acontecimientos más importantes dentro de Campo freudiano (Junto al Congreso de la AMP y los encuentros de PIPOL en Europa).

En esta oportunidad, el Onceavo ENAPOL, se realizó en Buenos Aires. Alrededor de 2 mil colegas de muchísimos países se dieron cita allí. Tres días de trabajo; cientos de mesas simultáneas en formato virtual durante la mañana, las conferencias plenarias y trabajos de las duplas durante la tarde, presentación de publicaciones, almuerzos, reuniones, intervenciones artísticas, música, fiesta…

La convocatoria del ENAPOL fue Empezar a analizarse. Un tema que nos interpela constantemente. No solamente por la implicancia que tiene en la práctica de cada quien, sino también en su vertiente política y epistémica. La conferencia de la presidenta de la AMP, Christiane Alberti: ¿Estar en análisis o analizarse? Fue una gran transmisión, precisa y orientadora, retomando referencias de Freud y de Lacan sobre ambas posiciones, estar en análisis o analizarse.

La librería del encuentro, la alegría del lazo.

Y en el ENAPOL, ¿Dónde estuve? Al estar dentro de la Nueva Política Juventud de la EOL, me ofrecí a participar y colaborar en el Equipo que tuvo a cargo la librería del ENAPOL. Fue una hermosa experiencia. Allí, entre miles de libros, escritos por cientos de colegas, elaboraciones singulares y elaboraciones colectivas como las publicaciones de Escuela (EOL, EBP, NEL); me sentí en casa. Vale aclarar que no conocía a nadie del Equipo de antemano, pero verifiqué la espontaneidad de la generación de lazos con colegas que comparten la misma causa, esa que siempre es joven…

Estar en la librería me permitió conversar con colegas de diferentes partes del país, así como también con colegas de otros países. Me llamó la atención verificar cómo el lenguaje del psicoanálisis atraviesa fronteras e idiomas, generando una gran red libidinal de miles de personas a lo largo del mundo. Esta experiencia, marcó para mí, algo de lo que significa el Campo freudiano. Si hay lugar y lazo, hay tierra fértil para el trabajo. No sin el deseo…