Verónica de Stéfano
Responsable Instancia de Lectura e Investigación NUBIOM: Violencia
CID San Juan
El incremento de la violencia en la actualidad en relación con épocas pasadas se escucha como una afirmación del Otro social. Intentaré transmitir algunas de las consideraciones a las que hemos llegado alrededor de esta problemática en un espacio de investigación sobre Violencia¹. La interrogación que nos orienta no apunta a una cuestión cuantitativa, ya que la estadística no es objeto del psicoanálisis, sino, más bien, a la modalidad con la que la violencia se manifiesta hoy.
Partimos de la premisa psicoanalítica de una agresividad constitutiva en el sujeto. Freud afirmó: “la inclinación agresiva es una disposición pulsional, autónoma, originaria, del ser humano”². La agresividad es considerada imposible de eliminar, educar, domesticar, prevenir, solo resta su tratamiento. La pulsión de muerte como agresión rompe con cualquier idea de bienestar, de armonía y de bondad entre los seres humanos. El malestar en la cultura es inherente a cualquier civilización y la relación con el semejante es difícil por estructura.
En su Seminario 5, Lacan nos aporta una definición de violencia: “lo que puede producirse en una relación interhumana es o la violencia o la palabra…solo se podría reprimir lo que demuestra haber accedido a la estructura de la palabra, a una articulación significante. Si lo que corresponde a la agresividad llega a ser simbolizado y captado en el mecanismo de lo que es represión”³. Es decir que esta agresividad constitutiva solo puede ser reprimida a condición de haber accedido a un registro simbólico. A partir de esto, cabe la pregunta por las condiciones que ofrece nuestra época para que esa operación acontezca.
La declinación de la Función Paterna, ya anunciada por Lacan en 19384, ha incidido en las subjetividades y también a nivel social en detrimento de la simbolización. El debilitamiento de los lazos identificatorios articulados al Ideal y de las figuras de autoridad caracteriza las relaciones interhumanas, en las que no se cuenta con la posibilidad de mediar con palabras. Hoy, “la violencia es la puesta en acto de la pulsión de muerte desprendida del orden simbólico”5.
En relación con este cambio de época, J. A. Miller nos aporta una distinción fundamental: “…el superyó freudiano produjo cosas como lo prohibido, el deber, hasta la culpabilidad, que son términos que hacen existir al Otro…el superyó lacaniano…produce un imperativo distinto: ¡Goza! Este es el superyó de nuestra civilización.6”
El discurso capitalista, como nombre de la época, ha convertido al sujeto en un objeto del mercado: hoy un hombre puede matar a otro por un celular, cuando antes lo hacía por una traición o por diferencias religiosas. Actualmente, el femicidio creciente es el pasaje al acto que convierte a una mujer en un objeto desechable, sin una ficción que lo acompañe. En otras épocas era un hecho al estilo de Otelo: el hombre, preso de la duda y del conflicto y con todo un relato colmado de angustia, pasaba al acto para escapar de ella. Nada de eso se escucha en nuestro tiempo.
Lo que llamamos fenómenos de violencia de la época: cortes en la piel, toxicomanías, femicidios, suicidios, violencia en todos los lazos familiares, racismo y todas las formas de segregación, difícilmente llegan a ser síntomas. Para que lo sean deben acompañarse de un padecimiento subjetivo y de una articulación significante. Pero son cada vez más difíciles de encontrar en la clínica de hoy. Por el contrario, son manifestaciones de un goce desregulado, sin límites, que desafían al psicoanálisis a poder operar desde su estrategia fundamental, la transferencia.
¹Instancia de lectura e investigación perteneciente a la Nueva Biblioteca del Instituto Oscar Masotta CID San Juan -NUBIOM: “La violencia y el cuerpo en la enseñanza de J. Lacan”
²Freud “El malestar en la cultura” (1930), Obras Completas, Tomo XXI, Amorrourtu editores, p.117.
³Lacan, Seminario 5 “Las formaciones del inconsciente”, Paidós, p. 468.
4Lacan, “La familia”, Editorial Argonauta, p. 93.
5Marisa Morao, Compiladora, “Violencia y Radicalización” Una lectura del odio en psicoanálisis, Grama ediciones, p. 69.
6J.A. Miller y E.Laurent, Seminario “El Otro que no existe y sus comités de ética”, Paidós, p. 19.