por María Josefina Maurín Flores
10 años
Ganadora XXXIII Certamen Literario Nacional e Internacional “Gonzalo Delfino” – 2018
San Juan
Josefina ganó el primer premio en la categoría infantil del Concurso Literario
Nacional “Gonzalo Delfino”, el cual se realizó en junio del 2018 en Gaiman
(Chubut ) a cargo de la Biblioteca Popular Ricardo Berwyn.
Lo escribió a sus 9 años, inspirada en la experiencia de trabajo acerca de los
derechos del niño y los derechos humanos llevada a cabo en el colegio donde
asiste.
Lo que motivó su participación a este concurso fue la posibilidad de ver
publicado su cuento junto con el de otros niños: el premio para quien ganara
era, además de un diploma y un plato con dicho reconocimiento, la impresión
del cuento en 10 ejemplares.
Ella desea que expresemos su gran gusto por leer y escribir .
Había una vez un pueblo lejano donde vivía una reina muy, pero muy malvada,
que decidió que los negros fueran pobres y esclavos. La reina tenía una hija,
pero lo gracioso era que la hija era un ángel, en serio ¡era la más buena y tenía
un nombre divino! Su nombre era Mariana.
Mariana no salió buena por su madre, sino por su padre, quien vivía en otro
lugar muy diferente. De pequeña, Mariana tuvo, junto a su madre, una vida
llena de lujos materiales pero pobre, muy pobre de cariño y afecto. También se
avergonzaba de cómo su madre, la reina, trataba a todos aquellos que la
ayudaban en el castillo.
En cambio, cuando iba a la casa de su padre, una casa sencilla pero con
aroma a amor… en sus comidas, en los chistes y los mimos que él le hacía, se
sentía muy viva y feliz.
Ya estando en el castillo, Mariana se acercaba a la reja que la separaba de
ellos y veía trabajar a los pobres negros esclavizados noche y día, y pensaba
en qué bueno sería un mundo mejor para ellos.
Cuando estaba en la escuela escuchó que quienes estudiaban tenían mejores
oportunidades y se le ocurrió ¡una gran idea!: “Enseñar a los pobres a leer y
escribir”.
Mariana y su padre, de quien heredó su buen corazón, colaboraron y así se
sumaron más y más. De allí, cuenta la leyenda que salió un hombre muy
importante que contagió a otros y estos a otros más para luchar por sus
derechos.
Tanto así fue… que dice la historia que su lucha tuvo frutos y en 1994 aquel
hombre se convertiría en el primer presidente negro. Cuando asumió, en sus
primeras palabras a la gente dijo: “Nunca, nunca jamás volverá a suceder que
esta hermosa tierra experimente la opresión de los unos sobre los otros”.
Al cabo de los años, lograron obtener sus derechos, los mismos que los de
todo ser humano, sin distinción de color, religión y clase social.
Moraleja
“Tratá a los demás como te gustaría que te traten a vos, con amor y respeto”.